''Y la masacre social continúa'', por Christian Zanotto

Ahora quieren implementar algo que fracasó en otras épocas para disciplinar a las masas de pibes ya que con su modelo neoliberal para unos pocos no pueden darle futuro a nuestros adolescentes cuando salen del colegio secundario.

Para los fascistas que defienden esto -desde un argumento u otro, deplorables todos los que haya al respecto- sólo resta decirles que la Gendarmería es parte del Ejército, siempre fueron formados dentro de lo antipopular, y sigue siendo así lamentablemente.

La famosa ''colimba'' anterior -que era lo mismo, que servía para disciplinar y controlar a las masas juveniles en el último año del secundario mandándolas a cumplir con el servicio militar obligatorio- guardaba esa misión antipopular de inculcarles el orden y el disciplinamiento castrense reaccionario.

Me acuerdo cuando era adolescente que oía anécdotas de personas mayores que contaban lo que hacían ahí y todos quedaban impresionados y les encantaban esas historias menos al que está escribiendo estas líneas. Me parecían estúpidas y bobas. No tenían nada de grandioso para mi. Igual siempre le tuve asco al Ejército debido a mi tío desaparecido, la historia sucia en nuestro país de la institución militar y la policía y demás.

Continuando, la famosa desaparición y luego muerte del soldado Carrasco -un chico de apenas dieciocho años, acaecida en marzo de 1994- vino a acabar con ese servicio y se derogó la ley, aunque Menem no quisiera, debido a las irregularidades del caso, la complicidad nunca comprobada (pero que era obvia, recordar que el cuerpo de Carrasco estuvo un mes desaparecido y luego "se lo encontró de repente" dentro del mismo cuartel donde ya se había buscado con anterioridad, suena muy familiar al caso Maldonado) de altos mandos del Ejército, los malos tratos que recibió el conscripto por supuesto y demás.

Vale recordar también que esta Gendarmería es la misma que asesinó a los compañeros militantes Santiago Maldonado y Rafael Nahuel, así que menos confío en algo ya impuesto por este régimen oligárquico-burgués neoliberal amarillento.

Esperemos que en octubre se despierte el pueblo argentino sino se padecerán peores cosas aún. Por ejemplo, la nefasta Reforma Laboral en puertas donde los trabajadores laburaremos hasta los 70 y 75 años, si llegamos, y hasta doce horas de corrido para obrero de fábrica, se quitarán el aguinaldo, y demás reformas antipopulares que nada tienen que ver con un Estado de derecho y verdaderamente democrático para todos y todas.

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Christian Gabriel Zanotto

Profesor de Historia

Estudiante de Licenciatura de Historia

Miembro de la Comisión Gremial del Suteba Zárate