Malestar en la ciudad porque Tenaris no suspendió sus actividades y forzó a sus empleados a trabajar
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Malestar en la ciudad porque Tenaris no suspendió sus actividades y forzó a sus empleados a trabajar

La siderúrgica hizo su propia interpretación del DNU firmado ayer que dispone el aislamiento social general y obligatorio, se consideró ''exceptuada'' por tener ''compromisos de exportación'', y forzó a sus trabajadores a asistir a sus puestos. Para colmo, el intendente Abella ratificó y apoyó esta interpretación con una nota ''para ser presentada ante quien corresponda''. Abel Furlán, secretario general de la U.O.M., aseguró que sus afiliados ''seguirán acatando el DNU'' y que desconocen ''toda intromisión del poder ejecutivo local en la relación laboral de los obreros metalúrgicos y Tenaris''.

Abella, Furlán y Rocca, protagonistas de una primera jornada ''caldeada'' de ''aislamiento social preventivo obligatorio''

Este jueves a las 00:00 comenzó una cuarentena generalizada y obligatoria para toda la población argentina, como medida de prevención contra la propagación del Coronavirus. La medida fue establecida por el presidente Alberto Fernández a través de un DNU que definió además las ''excepciones'', todas ellas relacionadas a los servicios básicos e indispensables para el bienestar social.

Sin embargo, en las primeras horas de la mañana del viernes comenzaron a aparecer publicaciones en las redes sociales de trabajadores de la empresa Tenaris que, increíblemente, tuvieron que presentarse a trabajar. Es que la siderúrgica hizo una peculiar interpretación del decreto y se auto-consideró ''exceptuada'' por tener ''compromisos de exportación así como a la cadena de la energía''. Lógicamente, el malestar se apoderó de los trabajadores afectados, porque se encontraron de repente en la disyuntiva de desobedecer un decreto presidencial y exponer su salud y la de sus familias, o correr el riesgo de sufrir represalias laborales por ignorar la directiva de su empleador.

Pero la indignación no solo fue de ellos sino también de los campanenses en general, que se solidarizaron con los trabajadores siderúrgicos, con los argumentos casi unánimes de que, primero, nada de lo que produce Tenaris es de necesidad vital para el correcto funcionamiento social (como sí lo es un supermercado o una farmacia) y que, segundo, de haber un contagio en la fábrica, que tiene alrededor de 3 mil empleados, las consecuencias sanitarias para la ciudad podrían ser catastróficas.

El malestar social, sin embargo, se vio notablemente acrecentado cuando comenzó a circular una nota firmada por el intendente Sebastián Abella en la que, a modo de ''certificado'' para ''presentar ante quien corresponda'', ratificó la interpretación de Tenaris de considerarse ''exceptuada'' del DNU 297/20.

A la tarde, finalmente, llegó la palabra más esperada por los trabajadores de la empresa: la de Abel Furlán, secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (U.O.M.) seccional Campana-Zárate. A través de un comunicado, el dirigente gremial expresó que ''ratifica a todas y todos sus afiliadas y afiliados, que se seguirá acatando el Decreto de Necesidad y Urgencia 297/20, que dispone el aislamiento social preventivo y obligatorio" y que la organización sindical que lidera ''resalta que ningún establecimiento de nuestra actividad está alcanzado en las cláusulas de excepción establecidas en el decreto presidencial para continuar con actividades productivas en el marco de la emergencia sanitaria que atraviesa la Argentina y al mundo''. En cuanto a la situación específica de la empresa Tenaris, el comunicado asegura que ''la única salvedad al cumplimiento de dicha norma, alcanza solo a las trabajadoras y a los trabaiadores de los servicios Ininterrumpibles".

Sobre la nota firmada por el intendente Abella ''para presentar ante quien corresponda'', Furlán advirtió que ''Excede en sus funciones y poderes el Sr. Intendente Municipal, Sebastián Abella, cuando mediante simple nota pretende autorizar el normal desempeño de la actividad de la empresa Tenaris S.A, en clara contradicción a la orden presidencial. Desconocemos toda intromisión del Poder Ejecutivo Municipal en la relación laboral de los obreros metalúrgicos y el empleador Tenaris S.A.I.C y, como vecinas y vecinos de Campana, rechazamos toda delegación de poder de policía y toma de decisiones públicas en el sector privado."

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