Conmoción en Lima por un violento femicidio
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Conmoción en Lima por un violento femicidio

Ayer encontraron finalmente el cuerpo de Stella Maris Rodriguez, la joven que era intensamente buscada. Su pareja y su suegra están detenidos, y el pueblo limeño organiza para esta tarde una nueva marcha para exigir justicia.


Un nuevo nombre se agrega a la larga lista de femicidos: se trata de Stella Maris Ramírez, una joven de 26 años que estaba desaparecida desde el 2 de agosto y era fuertemente buscada.


El principal acusado es Carlos Entivero, quien era su pareja, y a quien apuntan como cómplice es a su madre, Amelia Itatí Lezcano. El cuerpo de Stella Maris Ramirez apareció ayer por la tarde flotando en el Río Paraná. Según trascendió, estaba decapitada y con una gran herida a la altura del tórax.


Stella Maris llevaba seis años en pareja con Entivero y tenían una hija de 5 años. Sufría violencia de género por parte del detenido, tal es así que han habido numerosos reportes de gritos en la casa en la que vivían de parte de vecinos, quienes también aseguraran haberla visto muchas veces con golpes. Sobre la situación de violencia también se expresaron los padres de la joven quienes aseguraron que ''él le había prohibido comunicarse con ellos''.


Cabe destacar que si bien la joven fue vista por última vez el 2 de agosto, recién hace una semana la policía comenzó su búsqueda, ya que la denuncia fue realizada por sus padres apenas se enteraron de la situación. Las vecinas fueron las primeras en notar la desaparición de la joven, y debido a que oyeron varios gritos esa tarde es que temieron lo peor. Pero, según hemos averiguado, no les querían tomar la denuncia y, por eso, ellas fueron las que se comunicaron vía Facebook con la familia de la joven que llegó a Zárate y pudo, finalmente, dar aviso a la justicia.


La versión de Entivero es que Ramírez se había fugado con un amante llevándose a la hija de ambos, pero la justicia pudo detener a su madre con la menor llegando a Corrientes, donde tenía domicilio. Lezcano, suegra de la víctima, está detenida por su presunta complicidad en el crimen, ya que arribó a Lima al día siguiente de que al parecer ocurrió el femicidio.


La policía rastrilló varias zonas de Lima. Debido a que Entivero trabajaba en una tosquera con una retroexcavadora, la hipótesis más fuerte era que había desechado allí el cuerpo. Además, las vecinas relatan que la tarde del crimen pudieron oír gritos y golpes en la casa de la pareja, y que en las horas posteriores al crimen “quemó varias cosas y limpió con la hidrolavadora su camioneta”. En una prueba con luminol, la policía detectó grandes manchas de sangre en el cuarto de ambos y en la caja de la camioneta.


Los vecinos de Lima participaron activamente del rastrillaje y organizaron varias marchas pidiendo justicia. El martes fueron recibidos en la comisaría local donde recibieron precisiones del caso, y en las horas previas de una nueva marcha que iba a realizarse ayer se enteraron de la noticia del hallazgo de un cuerpo en las cercanías del Club de Pescadores de Lima.

Con el correr de las horas comenzó a confirmarse extraoficialmente que el cuerpo encontrado era el de Stella Maris, que estaba decapitada y con una gran herida en el pecho.
Créditos foto: Mauro Fabian Carballo

Según pudimos conocer por medio de fuentes cercanas a la búsqueda, hasta la mañana de ayer la familia de la víctima seguía sin asesoramiento legal y muchos de los testigos estaban asustados de la posibilidad de que el detenido quede en libertad y tome represalias. Además existía una fuerte molestia con el Municipio de Zárate porque, aparentemente, no estaba brindando apoyo y contención psicológica a los padres de Stella Maris, quienes llegaron de Chaco sin dinero y estaban siendo ayudados por los mismos vecinos.


Con la aparición del cuerpo, la causa judicial empieza a tomar forma y por ello está tarde a las 18:30 habrá otra marcha en el centro de Lima para exigir justicia por Stella Maris.

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