AViGAU adhiere a la lucha del Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia

El Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia se celebra el 17 de mayo para conmemorar la eliminación de la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales por parte de la Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esto fue resuelto el 17 de mayo de 1990. Si bien hubo avances en materia de leyes y derechos, la discriminación hacia el colectivo LGTB veintinueve años después continúa siendo un problema cuyas consecuencias son alarmantes.

Este 17 de mayo se conmemora el Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, el principal objetivo de la conmemoración es el coordinar todo tipo de acciones que sirvan para denunciar las diversas formas de discriminación a las que son sometidas las personas homosexuales, bisexuales y transexuales, favoreciendo así a la ampliación de sus derechos en todo el mundo.

Al respecto, desde el proyecto de extensión AViGAU que es dirigido por la Lic. Liliana Carrasco y el Lic. Matías Martínez Reina, docentes del Departamento de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Luján, se tiene por objetivo el abordaje de la violencia de género en todas sus dimensiones. En ese marco es que se adhiere al Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia.

“Vivimos en una sociedad capitalista, organizada en una estructura patriarcal y atravesada por la ideología del machismo. En ese marco, el colectivo LGTB se constituye, junto a la mujer, en víctimas por excelencia de la violencia machista, sufriendo discriminación en distintos ámbitos, entre ellos el laboral. Los índices de desempleo de la población transexual son muy elevados en Argentina, situación que los somete en muchos casos a ser explotados sexualmente a cambio de un ingreso que les permita sobrevivir en condiciones de extrema precariedad.”

En Argentina, desde el año 1992, el primer sábado de cada mes en la Ciudad de Buenos Aires se celebra la Marcha del Orgullo LGTIQ en conmemoración de la creación de Nuestro Mundo, primer movimiento homosexual en el país.

La LGTBfobia aún se encuentra muy arraigada en distintos ámbitos de la sociedad, como lo son las instituciones educativas. Gran cantidad de adolescentes manifiestan haber sufrido violencia en el escenario escolar, obturando de ese modo la posibilidad de construir su identidad o vivir de forma positiva su orientación sexual. Se reconocen a sí mismos como homosexuales, bisexuales o transexuales pero lo ocultan en público, o directamente no se atreven a reconocerse a sí mismos como tales.

La expectativa de vida del colectivo LGTB es muy inferior a la media, ya que el número de jóvenes infectados por el VIH sigue creciendo, dado que la prevención de las enfermedades de transmisión sexual resulta compleja en un entorno LGTBfóbico. La fobia cercena las posibilidades de hablar de salud sexual y de relaciones afectivas y sexuales entre personas del mismo sexo, estigmatiza, discrimina y margina a quienes viven con el VIH.

“Con la presente adhesión pretendemos contribuir a la sensibilización y generar conciencia en la comunidad sobre la problemática de la discriminación hacia el colectivo LGTB. Entendemos que se debe luchar en pos de construir una sociedad más inclusiva, donde la igualdad de oportunidades y la ampliación de derechos sea el horizonte a seguir. Consideramos muy significativo que temáticas como estas sean tratadas en el ámbito escolar, en el marco de la Ley de Educación Sexual Integral. De este modo, les estamos facilitando herramientas a las nuevas generaciones a fin de que puedan aceptar la diversidad y respetar al que es diferente, independientemente de su edad, condición sexual, ideología, religión, etc.”

La preocupación hacia el colectivo LGTB es inherente a AViGAU. Al respecto, el pasado 8 de marzo, cuando en el Centro Regional Campana de la UNLu se inauguró el Banco Rojo como acción de extensión vinculante al proyecto se hizo referencia explícita al colectivo en cuestión. En esa oportunidad, a la frase original: “En memoria de todas las mujeres que fueron asesinadas por quienes decían amarlas", se añadió la expresión aludiendo a "las identidades disidentes víctima de la violencia patriarcal.”